El encuentro final
16 de noviembre de 1532
Pizarro organizó a sus soldados en posiciones estratégicas que
permitieran dominar a la numerosa comitiva que acompañaría al inca.
Llegado el día del encuentro, Atahualpa se instaló en la plaza
principal de la ciudad, la misma que quedó ocupada por el ejército
inca.
El primer español en salir al frente del inca fue el sacerdote
dominico fray Vicente Valverde, llevaba una biblia.
Leyó a Atahualpa el “requerimiento”, documento que instaba al inca a
aceptar voluntariamente la fe católica y el sometimiento a la autoridad del rey
de España.
Uno de los traductores indígenas comunicó a Atahualpa el mensaje, quien
luego de revisar la biblia, la arrojó al suelo.
Pizarro, ante este hecho, salió de su escondite y ordenó el
ataque y la captura del inca.